Las bicicletas a las que se les adaptó un motor de combustión o eléctrico, o las bicicletas eléctricas, generan dudas respecto a si se requiere licencia de conducir; la respuesta es no, tampoco marchamo, ni inspección técnica.
Según la Dirección Jurídica del Consejo de Seguridad Vial, cuando a una bicicleta se le coloca un motor, mientras conserve la capacidad de que se desplace mediante el pedaleo, no deja de ser bicicleta.
Lo mismo ocurre con aquellas bicicletas eléctricas, que vienen de fábrica con esa cualidad, siempre y cuando se pueda pedalear y pueda avanzar con el impulso humano.
No obstante, la bicicleta adaptada o de fábrica, que no pueda ser pedaleada, deja de ser una bicicleta y se convierte en bicimoto por lo que sí requiere la documentación citada.
Es fundamental, como lo señala la Ley de Tránsito, utilizar un casco adecuado, ropa reflectante y luces en las noches, para hacerse visibles ante los ojos de otros actores viales.
No conducir por las aceras, no sujetarse a otros vehículos, no llevar menores de tres años, en caso de que la bicicleta sea para más de un pasajero, y no utilizar rutas con velocidades permitidas superiores a los 80 kilómetros por hora, son otras reglas que los ciclistas deben cumplir.