Este lunes 2 de mayo, el mandatario saliente, Carlos Alvarado Quesada, presentó su último informe de labores ante los nuevos diputados en el Congreso.
En la primera parte se refirió al aspecto económico y fiscal de su Gobierno, señalando que el “Banco Central informó que el crecimiento económico del país en 2021 fue de un 7,8%”.
“Muy superior al esperado y yendo más allá de la recuperación de la caída provocada por el COVID-19: la economía sí se reactivó”, insistió el presidente.
En su discurso dijo que “en 2021 Costa Rica rompió el récord de exportaciones de bienes, creciendo 24% a 14.553 millones de dólares. Es el mayor incremento de exportaciones de los últimos 15 años en el país”.
Alvarado explicó que, según él, la robustez en la hacienda pública es la fuerza de un Estado de Derecho, para invertir en campos del desarrollo como la niñez, cultura e innovación.
En otro orden, defendió la gestión de un “gobierno laico”, lo cual justificó así: “Defendimos el derecho de toda persona a casarse con su pareja frente al Estado, y hoy tenemos una sociedad más libre e inclusiva gracias al matrimonio igualitario. También aplicamos una serie de políticas públicas de reconocimiento de derechos para la población LGTBIQ, incluida la legislación contra los crímenes de odio”.
En un repaso del desarrollo de infraestructura en su Gobierno, Alvarado considera que “para los costarricenses que durante las últimas décadas visitaron otros países de la región centroamericana era evidente, y motivo de vergüenza, el rezago de nuestra infraestructura pública”; por lo que “en estos cuatro años las obras mismas son prueba irrefutable de que el país avanzó en esta materia”.
Con respecto a la Región Huetar Norte, mencionó el nuevo servicio de Emergencias del Hospital de San Carlos, así como los acueductos rurales en Sarapiquí, en Santa Rosa de Pocosol, Santa Fe de Los Chiles, Veracruz, y Moravia de Cutris.
La pandemia fue otro de los temas que abordó el mandatario saliente, pues para él, Costa Rica pertenece a un grupo pequeños de países que tuvieron una baja tasa de mortalidad, por COVID-19, mientras se generaba un alto crecimiento económico, por lo que el rendimiento costarricense para enfrentar la emergencia sanitaria estuvo a la altura de países como Alemania, Suiza y Luxemburgo.
El presidente saliente resaltó la temática ambiental. “El país cumplirá para 2022, con el 83% de las metas planteadas para la primera etapa del Plan de Descarbonización”.
Profundizó diciendo que, “con la instalación de centros de recarga se puede recorrer todo el país en carros eléctricos” Además, señaló que quedan listos para desarrollarse dos proyectos de trenes eléctricos, estos son: el Tren Eléctrico Metropolitano y el Tren Eléctrico Limonense de Carga, que recorrerá Limón y conectará esta región con la Zona Norte.
Destacó que “durante los últimos cuatro años se desarrollaron 500 mega-operativos que han logrado cifras récord en incautación de droga, disminución de hurtos, robo y tacha”.
Además, resaltó el mejoramiento salarial de los oficiales, la baja en el hacinamiento carcelario, y el crédito aprobado con el BID para la construcción de 8 centros cívicos en todo el país y varias delegaciones nuevas de policía.
Advirtió, en la última parte de su informe, que tanto la Asamblea Legislativa actual como el Poder Ejecutivo entrante, deben enfrentar y resolver faltantes de dinero para la operación de varios ministerios.
“Como señalamos desde octubre, cambios de partidas que hizo el Congreso anterior provocan que varios ministerios no tengan en algunos rubros lo suficiente para cubrir parte del año”, señaló.
El mandatario finalizó diciendo: “Me confieso amante de este país. El más bello y maravilloso del mundo. El que no tiene ejército, el que recibe mandatarios con niños y niñas con banderas, el defensor por excelencia de los Derechos Humanos, la paz y la democracia. El que lidera al mundo en la lucha contra el cambio climático y da esperanza a la humanidad”.