- Aquí en esta nota le explicamos la Cronología Litúrgica de la Semana Santa.
La gran virtud de los calendarios y almanaques es que ofrecen sus contenidos, en el que se explica el significado de cada fiesta, de manera que haya un tiempo asignado a cada lección.
Los cantos, ritos, oraciones y el culto propiamente dicho, al que no podían asistir ni los catecúmenos ni los penitentes, complementan la parte de enseñanza, a la que sí tenían acceso.
Al ser la Semana Santa, en especial el Triduo Sacro, un tiempo denso en cultos religiosos, se hace necesaria la presentación siguiendo criterios cronológicos y litúrgicos. Junto a las celebraciones de la iglesia, ocupan lugar de honor las del pueblo.
El DOMINGO DE RAMOS: Se celebra la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. Es un anticipo de la Pascua. Los tradicionales ramos son los protagonistas. La primera lectura de la Pasión. Primeras procesiones populares.
LUNES SANTO: Tras el esplendor del Domingo, la liturgia entra en la angustia de la pasión siguiendo los últimos días de vida de Jesús. El Evangelio nos presenta el episodio de la Magdalena lavando y ungiendo los pies de Jesús, con el escándalo de Judas. En él se han inspirado algunos pasos y procesiones.
MARTES SANTO: Se caracteriza su liturgia por la exaltación de la Cruz, que se propone como motivo de orgullo para los cristianos. El Evangelio de la misa de este día es la Pasión según San Marcos. En muchos lugares el protagonista de las procesiones de este día es la Cruz.
MIÉRCOLES SANTO: Es el día en que se reúne el Sanedrín correspondiente al tribunal religioso judío, para condenar a Jesús. Este episodio es el que convirtió los miércoles en días de ayuno. Hoy es el primer día de luto de la iglesia, en que se celebra el Oficio de tinieblas, una especie de funeral por la muerte de Jesús. Los pasos y procesiones de este día reflejan el aumento del dramatismo.
JUEVES SANTO: Es el día de la institución de la Eucaristía de Cristo, que se queda para nosotros como pan y bebida de salvación, su cuerpo y sangre de cristo. Además, es el día de institución del sacerdocio ministerial y el día del lavatorio de los pies, que es un ejemplo de servicio que deben de tener todos los pastores de nuestra iglesia, el primero es el último y servidor de todos. Además, se nos da el nuevo mandamiento “amaos los unos a los otros, como yo os he amado”
VIERNES SANTO: Este día constituye el núcleo central de la Semana Santa. Es el día del máximo dolor y de la muerte de Jesús. Es día de riguroso luto y no se celebra misa sino un rito de oración. Se lee la Pasión según san Juan, se reza por todas las causas en una continua ceremonia de arrodillarse y levantarse y en el centro de la celebración está la solemne adoración de la Cruz: “He aquí el leño de la Cruz del que pendió la salvación del mundo”. “Venid, adorémoslo”. Hoy es el segundo gran día de las procesiones en que se vuelca el dolor por la muerte de Cristo y el dolor de su madre.
SÁBADO SANTO: Este día propiamente no hay culto oficial. Es día de luto por la muerte del Salvador. Continúa durante el día la visita de los monumentos, la celebración del Vía crucis y otras prácticas piadosas. Al anochecer empieza la gran Vigilia Pascual, que en su primera parte, bendición el fuego nuevo y del agua, lecturas, letanías, profesión de fe y Bautizos, corresponde propiamente al sábado santo; pero la Misa de Gloria, solemnísima, con volteo de campanas y llena de aleluyas, corresponde a la celebración pascual de la Resurrección.
DOMINGO DE PASCUA DE RESURRECCIÓN: La alegría iniciada en la misa de la Vigilia Pascual, que siempre es después de las 12 de la noche, la primera hora del domingo, se prolonga durante toda la mañana. Al mediodía vuelve a celebrarse una Misa solemnísima para celebrar la Resurrección. En verdad, Cristo ha resucitado. Ese es el saludo pascual en la iglesia ortodoxa.
Es de este modo como se conmemora cada uno de los días de la Semana Mayor. Representando uno a uno momentos de reflexión para nuestras vidas.