El Servicio Nacional de Guardacostas junto a autoridades de Estados Unidos, dieron con el primer golpe del año al narcotráfico internacional.
Se logró capturar una lancha rápida con más de tonelada y media de marihuana y cocaína en mares ticos.
La nave no portaba bandera, ni matrícula, medía 32 pies de largo y estaba equipada con dos motores de 200 caballos de fuerza, además de llevar a bordo 15 estañones con posible combustible.
La captura tuvo lugar el viernes 21 de enero, a 23 millas náuticas de Punta Llorona, Península de Osa, después de que las autoridades recibieran una alerta acerca de la presencia de una lancha sospechosa en el Pacífico Sur.
Con la colaboración de aeronaves estadounidenses, los oficiale del Grupo de Operaciones Especiales del Guardacostas, aprehendieron a dos tripulantes, uno de ellos identificado como de apellidos Góngora Rendón, de nacionalidad colombiana, quien se desempeñaba como capitán; y, a un costarricense de apellidos Mora Bermúdez.
La nave fue trasladada hasta Golfito, donde agentes de la Policía de Control de Drogas se encargaron de las diligencias correspondientes junto con el Ministerio Público.
Se determinó que la embarcación transportaba 1.624 paquetes con aparente marihuana, de estos 41 paquetes con un peso aproximado a medio kilo cada uno y 1.583 paquetes con un peso aproximado a un kilo cada uno.
Además, la lancha llevaba 40 paquetes con aparente cocaína con un peso aproximado de un kilo cada uno.