El Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), por medio del Servicio Fitosanitario del Estado (SFE), emitió una resolución que amplía el uso de tres productos formulados, permitiendo su aplicación en caña de azúcar, con el fin de aliviar la situación que viven familias y agricultores de distintas comunidades por la presencia de la plaga conocida comúnmente como hormiga loca.
Así lo anunció este miércoles 23 de agosto, el Ministro de Agricultura y Ganadería, Víctor Julio Carvajal Porras, durante la conferencia de prensa en Casa Presidencial. “Esta plaga está representando un alto riesgo para cultivos como la caña de azúcar, el café, plantas ornamentales, entre otros. También está afectando a las personas que residen en esas zonas rurales y está teniendo impacto en los animales silvestres, como pizotes, iguanas y perezosos. Por eso, se toma la decisión de apoyar su combate, permitiendo el uso de insecticidas, de manera temporal, como parte de los componentes de un cebo que se prepara y se coloca en los nidos, ubicados en plantaciones de caña de azúcar”, detalló.
La resolución del SFE establece que el uso de estos productos se realizará de manera coordinada con los técnicos de la Liga Agrícola Industrial de la Caña (Laica), con el fin de facilitar los cebos a los productores de caña con la debida asistencia técnica para que la aplicación se haga de manera correcta y efectiva.
La ampliación del uso de los productos en caña estará autorizada hasta diciembre de este año, ya que, de acuerdo con los especialistas, las poblaciones de la plaga disminuirán conforme disminuyan las lluvias.
«A las personas, en sus hogares, se les recomienda usar otros productos autorizados para uso doméstico en casas y jardines, y evitar productos de uso agrícola que pueden representar un riesgo», afirmaron las autoridades en un comunicado de prensa.
Según los expertos, la hormiga Nylanderia fulva, conocida como hormiga loca, es una especie exótica, muy invasiva.
Tiene gran capacidad para diseminarse y desplazarse y se registró en el país, por primera vez, en 2017.
Es capaz de transportar otros organismos como áfidos (pulgones), ácaros, cochinillas y escamas, que pueden afectar los cultivos.
Además, ataca especies de animales domésticos, de producción y silvestres como iguanas, garrobos, aves, armadillos, entre otros, afectando la biodiversidad, e incluso puede colonizar y establecerse en las casas de habitación y otras infraestructuras.
Actualmente se reporta presente en comunidades de la Región Occidental, (San Ramón, Palmares, Naranjo, Sarchí, Atenas, Grecia, Poas, Alajuela y parte de Heredia); del Pacífico Central, (Puntarenas, Esparza, Monte de Oro y San Mateo); de la región Huetar Norte, (La Abundancia de Ciudad Quesada, El Tanque, Fortuna, Los Lirios de los Chiles, Boca Arenal y Chachagua); en la Región Chorotega, (Cañas y focos aislados en los cantones de Abangares y Bagaces); y, en el Área Central del país, en San Pedro y Desamparados.