En los primeros cinco meses de este 2022, el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) sumó 11 torres de telecomunicaciones, en operación, en diferentes territorios indígenas, de las Zonas Sur y Atlántica. Estas se unieron a las 13 que brindan servicios de telefonía e internet y fueron integradas a lo largo de 2021.
Este proyecto forma parte del Programa Comunidades Conectadas del Fondo Nacional de Telecomunicaciones (Fonatel). Con este, el Instituto llevará conectividad a localidades de 14 territorios indígenas.
Las últimas radiobases aceptadas por el Consejo de la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel) y el Fideicomiso a cargo en la Zona Sur se ubican en Palmital, Sipar, Bribri de Salitre y Río Azul (territorio indígena Bribri de Salitre). A esta se suma la situada en Las Vegas, en Rey Curré de Buenos Aires.
Por otra parte, en la Zona Atlántica, el 10 de junio se aceptaron tres torres más: Cerere y Boca Cuen –en el territorio Cabécar de Tayní– y San Miguel Sibujú, en Bratsi de Talamanca Cabécar.
“El uso de tecnologías de comunicación en territorios indígenas ha ido en aumento producto del despliegue de infraestructura. A inicio de año, en estas zonas se conectaban a nuestras radiobases 22.900 dispositivos móviles por mes; hoy esa cifra llega a 59.800”, explicó Mauricio Rojas, gerente de Telecomunicaciones del ICE.
Desde que se incorporaron las primeras torres, en Amubri y Suretka de Talamanca Bribri, el ICE ha conectado a más de 40 poblados de siete territorios indígenas. Actualmente, las obras avanzan según el cronograma, con cinco radiobases en ejecución, que beneficiarán a dos nuevos territorios: Bribri de Cabagra y Guaymí de Conte Burica.