El pasado domingo 16 de julio, la réplica de la imagen de la Virgen de los Ángeles, de la Basílica de Cartago, que se exhibe en el Santuario Mariano Diocesano, en Los Ángeles de La Fortuna, regresó para su vestición, luciendo aún más hermosa, luego de someterse, por primera vez, a una restauración completa.
Noticias Santa Clara conversó con Fernando Soto, de Soto del Valle Orfebres, encargado de brindarle dichos cuidados.
En la actualidad, Soto es el joyero y guardián oficial de la Virgen de los Ángeles, de la Basílica de Cartago.
La orfebrería es una tradición que ha permanecido en su familia por más de 230 años.
Soto contó que fue su padre, José Antonio Soto (q.e.p.d), quien elaboró la réplica de la imagen, en su tamaño original, en el año 2011.
De acuerdo con Soto, un grupo de la Iglesia de la filial, fue quien se organizó para solicitar la elaboración de la pieza divina.
Añadió que su bisabuelo, Emilio Del Valle, en 1996, fue quien realizó la reforma de los resplandores de la imagen Mariana de Cartago. Moldes únicos que han conservado en la familia durante años.
La réplica del Santuario de la Diócesis de Ciudad Quesada estuvo cerca de cinco meses en restauración.
Asegura que ninguna réplica es exacta, pues la misma cuenta con detalles elaborados a mano y tallados con martillo.
Soto asegura que las imágenes deben ser cuidadas con mucho detalle, especialmente al contacto, porque los perfumes, cremas y otros productos de limpieza tradicionales, pueden dañar el material.
Enfatizó en que el clima del lugar influye en la conservación de este tipo de imágenes. No se recomienda exponerlas al sol o al movimiento porque pueden sufrir fracturas.
Esta es la primera vez que se realiza una restauración a la imagen mariana sancarleña, sin embargo, años atrás, de acuerdo con Soto, se le había realizado una limpieza.
Con la restauración reciente, se garantiza su belleza y protección para los próximos cinco años.
En esta ocasión, debido al deterioro, la imagen se lijó, se pulió y se le aplicaron baños directos de color de oro de 18 quilates; y, de plata pura.
La orfebrería de la familia Soto utiliza como material principal para la elaboración de sus imágenes, el latón. El artista orfebre mencionó que este es incluso más fino que el bronce; y, maleable, asimismo se utiliza para elaborar los cálices.
La Virgen de los Ángeles es una insignia no solo para los costarricenses que peregrinan cada 2 de agosto, su divinidad ha trascendido las fronteras, forma parte de la cultura de los pueblos, de los milagros que profesan su fe y del valor histórico y cultural que la misma representa.
Como lo indicó el Padre Mainor Araya, párroco de La Fortuna, la restauración se realizó a pedido del Obispo de Ciudad Quesada, Monseñor José Manuel Garita Herrera.
Un fiel, quien quiso quedarse en el anonimato, fue quien dio el apoyo económico de forma generosa, para esta restauración.