El expediente 22.188, “Ley de comercio al aire libre”, el cual ya fue aprobado en segundo debate por 41 legisladores, faculta a las municipalidades para autorizar a los patentados o licenciatarios, el desarrollo temporal de actividades comerciales en espacios públicos como aceras, parques, plazas, vía pública y calles adyacentes a los respectivos establecimientos comerciales.
El objetivo es que estos puedan promover y ampliar el comercio, el aprovechamiento del espacio público, la seguridad ciudadana y generar mayor actividad económica, en un marco de respeto del derecho al libre tránsito, la accesibilidad y el mantenimiento y protección de los espacios públicos.
“La autorización de comercio al aire libre para utilizar los espacios públicos, para la explotación de la actividad comercial, no crea a favor de los patentados o licenciatarios ningún derecho real ni acción posesoria sobre tales vías, dichos permisos se otorgan en condición de precario y por el plazo establecido por la municipalidad correspondiente al momento de otorgar la autorización”, dice la norma.
La totalidad de los ingresos generados por la autorización de comercio al aire libre deberá utilizarse para el mejoramiento general y la seguridad del espacio público y no se puede afectar la movilidad como lo establece la Ley 7.600.
La diputada Karine Niño resaltó la importancia de este proyecto al indicar que es una oportunidad para promover la cultura y la gastronomía de los pueblos.
Desde: hay
COMERCIO LIBRE
Hasta: segura
El congresista Roberto Thompson Chacón uno de los proponentes del proyecto, explicó que ni los parques ni las aceras se entregan a las empresas privadas, sino que con este proyecto “se está buscando una verdadera reactivación económica al propiciar lugares abiertos y ventilados, recordando que los espacios públicos son de la gente”.