Este jueves 9 de junio, el Consejo Superior de Educación acordó la cancelación de las Pruebas FARO, tras una solicitud planteada por el Ministerio de Educación Pública (MEP).
La solicitud del MEP tomó en consideración que durante la pandemia los estudiantes vivieron un contexto pedagógico atípico, según se resalta en un comunicado de prensa.
La Ministra de Educación, Anna Katharina Müller Castro, destacó que el modelo de “pruebas estandarizas son relevantes para medir los alcances de los procesos de enseñanza y aprendizaje”, pero que en medio de la emergencia sanitaria provocada por el COVID-19 “la comunidad educativa no tuvo todas las condiciones necesarias para desarrollar una educación equitativa y de igualdad de oportunidades”.
Resaltó que la aplicación de las Pruebas FARO “generó mucho estrés en los estudiantes” y un rechazo generalizado de la comunidad educativa, visto en muchas manifestaciones contrarias a estas pruebas.
La Ministra resaltó que las pruebas “permitieron obtener un diagnóstico importante para que se ejecuten planes de acción para la mejora de los niveles educativos de los estudiantes”.
De este modo, según el anuncio, se cancela la aplicación de las Pruebas Faro convocadas para junio y noviembre del presente año.
“Las pruebas no serán requisito para la obtención del
Certificado de Conclusión de Estudios I y II Ciclo de la Educación General Básica y el Título de Bachiller en Educación Media y solo será necesaria la aprobación del plan de estudios 2022”, dijo Müller.
También, se acordó instruir al Ministerio de Educación Pública para realizar en 2023 una evaluación de carácter diagnóstico a los niveles de sexto y undécimo año de colegios académicos –o niveles equivalentes– y de duodécimo año de colegios técnicos.
La Ministra agregó que la calificación de esas pruebas de 2023 no tendrá efecto en la aprobación del curso lectivo, pero su cumplimiento será requisito obligatorio para obtener el certificado de conclusión de estudios correspondiente.