Este viernes 5 de marzo será un día que quedará en la historia.
Por primera vez un Papa pisó tierra iraquí.
El Papa Francisco, con su mensaje de unión, perdón, solidaridad y paz, como parte de su 33 Viaje Apostólico Internacional, arribó en Iraq, a las 3:45 p.m., hora de Bagdad, donde sostuvo una reunión con las autoridades gubernamentales.
El medio Vatican News informó que el Santo Padre arribó bajo el lema: “Todos vosotros sois hermanos”.
Francisco voló durante cuatro horas y media, sobre Italia, Grecia, Chipre, Palestina, Israel, Jordania e Iraq; el Pontífice envió telegramas a las autoridades de cada uno de estos países, como parte de su tradición.
En Costa Rica, Mons. Daniel Francisco Blanco Méndez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de San José y presidente de la Comisión Nacional de Comunicación de la Conferencia Episcopal, destacó la importancia del viaje que realiza el Santo Padre.
En primera instancia, señala que el viaje hace referencia al sueño de San Juan Pablo II, “que deseó y planeó una visita a este país, pero que por motivos de seguridad debió ser cancelado”.
Además, porque en este país se encuentra la Ur de los Caldeos, ciudad en la que fue llamado Abraham, “padre en la fe de las tres grandes religiones monoteístas, al sur de lo que hoy es Iraq”, indicó Monseñor Blanco.
Otro punto que destacó fue, el mostrar la cercanía de la Iglesia a todos sus hijos, “aún aquellos que son una pequeña minoría en un país no cristiano”, pues el Papa se muestra como un peregrino en tierra de mártires.
Por último, el viaje de Su Santidad a Iraq, significa “cercanía de Dios a todos sus hijos”, tomando como referencia la alegría que ha causado su visita en tierra iraquí y porque es el único líder mundial que los ha visitado en mucho tiempo, reseñó Monseñor Blanco.