En una época marcada por cambios y adaptabilidad, los consumidores están orientando sus compras de frutas y vegetales en cuatro tendencias: seguridad, enfoque de sostenibilidad, consumo de productos locales y consumo de alimentos que refuerzan el desempeño mental y del sistema inmunológico.
Esto se desprende del estudio Tendencias de comercialización de frutas y vegetales en tiempos de COVID-19, realizado por la Promotora del Comercio Exterior de Costa Rica (Procomer).
El estudio determinó que, a pesar de la crisis por la pandemia, el sector agroalimentario del mundo ha sido resiliente y sus exportaciones han experimentado un crecimiento de 5% en el primer semestre de 2020 en relación con el mismo periodo de 2019.
Los consumidores están cambiando sus hábitos de compra, ahora tienen una mayor preocupación por la inocuidad y trazabilidad en sus alimentos, por eso demandan seguridad.
También se orientan por productos frescos basados en un bajo impacto ambiental; por ejemplo, menor huella de carbono o adoptando conductas como disminución del desperdicio y consumo de alimentos basados en plantas.
La compra de productos locales tiene que ver con la contracción de la economía mundial y la alteración de las cadenas de suministro.
El consumo de alimentos que apoyen el desempeño mental y el fortalecimiento del sistema inmunológico, tiene que ver con las recomendaciones que las autoridades de salud han dictado; por ejemplo, productos que optimicen el desempeño mental mediante ingredientes adaptógenos (sustancias naturales para reducir estrés), nootrópicos (sustancias que mejoran la capacidad cognitiva); y los que mejoran a respuesta del sistema inmunitario, como la mora y la cúrcuma.
Ante las tendencias mencionadas, se han consolidado modelos de negocio como ventas directas al consumidor a través de plataformas digitales y entregas a domicilio, la personalización de kits de comida para regímenes específicos de alimentación, que reducen el contacto en los medios de pago y visita de establecimientos.