- Nuestro Obispo Monseñor José Manuel Garita responde ante falsas noticias publicadas en el Periódico La Teja.
A raíz de la homilía pronunciada en la Solemnidad en honor a Nuestra Señora de los Ángeles en Cartago, no ha faltado alguna voz que haciendo eco del sentimiento antirreligioso y anticlerical mueve en redes sociales información falsa y prejuiciosa, acompañada de datos inexistentes y distorsionados, como por ejemplo una nota publicada en el segmento “Chepito” del Periódico La Teja.
“Muchas personas muy fácilmente y sin ninguna responsabilidad propagan desinformación sobre supuestos privilegios de la Iglesia Católica, y esto es algo que solo se puede combatir con la verdad objetiva”, dijo Monseñor José Manuel Garita nuestro Obispo de Ciudad Quesada.
Monseñor aclaró que la fuente primordial de recursos económicos de la Iglesia Católica en Costa Rica se recibe de los fieles católicos, mediante ofrendas y otras donaciones. Gracias a estos aportes es que la Iglesia realiza su labor evangelizadora, pastoral, catequética, celebrativa, educativa, cultural, asistencial y de promoción humana integral en las ocho diócesis del país, y en sus más de 300 parroquias cercanas a la realidad de las personas. Asimismo, a través de movimientos pastorales, grupos parroquiales e iniciativas laicales.
Segundo: Que gracias al aporte de los fieles es que la Iglesia asiste con alimentación y vestido a miles y miles de familias en todo el país. Tercero: Mediante ese aporte es que la Iglesia también da formación integral, seguimiento espiritual y la búsqueda de condiciones más humanas para personas de escasos recursos.
Cuarto: El artículo 75 de la Constitución Política de Costa Rica establece la obligación de contribuir al sostenimiento de la religión católica; sin embargo, desde el 2015 en adelante el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, dejó de girar dinero a la Iglesia Católica.
Cabe decir también que la inmensa mayoría de las obras sociales que realiza la Iglesia se hacen sin el aporte estatal, mediante los indicadores aquí expresados, y es completamente con el dinero que la Iglesia recibe de sus fieles o de personas de buena voluntad, o de servicios que la misma Iglesia brinda, como se sostienen obras de interés social, obras que van en beneficio del cuidado de las personas, la mayoría de ellas en situación vulnerable, como personas en situación de calle, entre otros.
¿Quién organiza de primera mano la acción social para atender las necesidades primarias de la población en riesgo tras un desastre natural o emergencia? Son la inmensa mayoría de nuestros católicos y personas no católicas de buena voluntad que confían en la Iglesia para cooperar con estas situaciones de emergencia nacional o internacional. Igualmente, mucha de la infraestructura de parroquias se utiliza como albergues que en primera instancia dan cobijo a los más necesitados.
Nuestro Obispo respondió ante estas publicaciones por parte del Periódico La Teja diciéndole que con gusto él le pude compartir el mensaje del pasado sábado, el cual no es exhaustivo, pero le daría detalles sobre la misión de que tiene la Iglesia Católica.